
La motivación nos ayuda a fijarnos un objetivo y esta directamente relacionada con el éxito de cualquier meta.
Fijarnos en este punto nos puede ayudar a potenciarla. Además, hay una serie de consejos para aumentar la motivación.
La motivación es un concepto complejo y define en gran parte nuestro éxito e incluso calidad de vida.
Es por ello, que en este artículo vamos a hablar de cómo aumentar nuestra motivación a través de dos preguntas clave. Preguntas exploratorias y preguntas motivadoras.
Las preguntas exploratorias consisten básicamente en ser más conscientes de dónde estamos actualmente. Parece algo básico, pero muchas veces vamos con el piloto automático puesto sin preguntarnos si realmente estamos donde queremos estar.
Nos vamos a ir haciendo ambas preguntas en niveles diferentes:
Aquí nos referimos al entorno y a todos sus elementos. Nuestro contexto actual es de vital importancia y va a definir en gran parte nuestra toma de decisión.
Imagina que quieres cambiar de pautas de alimentación, pero en casa no están de acuerdo y siempre que lo intentas, cae algún comentario del tipo “pero ¿por qué lo haces, si ya estás delgada?”. Aunque parezca un comentario tonto, puede ir calando e influir de manera negativa en ese cambio que estoy buscando.
Primero nos debemos preguntar si acaso podemos cambiar algo de nuestro entorno o si somos nosotros quienes deben cambiar de entorno.
Si siento que mi jefe no me está motivando a crecer laboralmente y ya me he sentado a hablar con él varias veces del tema, me debo plantear cambiar de entorno (de trabajo).
A veces encontramos fuertes motivaciones, pero nos faltan ciertas herramientas para que se puedan cumplir esos objetivos que nos hemos propuesto.
Imagina que viajar y conocer otras culturas te motiva enormemente, pero te falta nivel de inglés para poder comunicarte siempre que viajas. Antes de nada, tendré que plantearme mejorar mi nivel de inglés para poder seguir disfrutando del viajar y sus encantos.
Es complicado estar en paz con uno mismo si tus conductas del día a día no están alineados con tus valores.
Imagina que eres una persona muy trabajadora y te esfuerzas todos los días por sacar tu trabajo y familia adelante. Siempre te has definido como alguien trabajador y voluntarioso. Sin embargo, en área de salud física cada vez te estás dejando más. Tienes sobrepeso, no te cuidas comiendo y no haces ejercicio físico.
Pregúntate: ¿están estas conductas alineadas con mis valores de esfuerzo, amor propio, cuidado personal, etc.? Ser conscientes de estas disonancias nos puede ayudar a encontrar la motivación al cambio.
Muchas veces nos ponemos etiquetas que nos definen y nos limitan. Estas creencias sobre nosotros mismos pueden venir de fuera o ser autoimpuestas.
Aquí es esencial reconocer las creencias limitantes e irracionales. Imagina que quieres convertirte en una persona más organizada, pero que desde pequeño te han llamado “desordenado”. Si pretendo encontrar la motivación para cambiar de hábito no puedo hacerlo desde el “soy desordenado” pero “voy a intentar cambiar”. El verbo SER no limita, nos impide convertirnos en la mejor versión de nosotros mismos. Reconoce primero las creencias irracionales que crees que te pueden estar definiendo a día de hoy y lucha contra ellas.
Es importante encontrar un sentido a lo que hacemos y pensar que estamos dejando nuestro granito de arena para que el mundo actual o futuro mejoren, puede ser una gran fuente de motivación. Encuentra aquel trabajo o actividad que den sentido a tu existencia.
Tomado de https://psicologiaymente.com/psicologia/como-aumentar-nuestra-motivacion