
Las nuevas investigaciones médicas nos llevan a afirmar que la Meditación es tan potente como los fármacos para el control de la ansiedad. Se calcula que más de trescientos millones de personas en el mundo, sufren algún tipo de ansiedad. El efecto de la meditación con conciencia plena, ayuda a personas con pensamientos ansiosos y negativos y también con trastornos relacionados con la ansiedad, que no son fáciles de controlar.
La reducción del estrés a partir de una terapia basada en atención plena es tan efectiva para reducir la ansiedad como el antidepresivo de primera línea escitalopram, según muestra una nueva investigación.[1]
«Animaría a los médicos a poner en la lista la práctica de la meditación como una posible opción de tratamiento para los pacientes a los que se les diagnostican trastornos de ansiedad. Los médicos deberían sentirse cómodos recomendando clases de meditación grupales en persona», dijo a Medscape Noticias Médicas la investigadora del estudio, Dra. Elizabeth A. Hoge, directora del Programa de Investigación de Trastornos de Ansiedad del Georgetown University Medical Center, en Washington, D. C., Estados Unidos.
Los hallazgos se publicaron en versión electrónica el 9 de noviembre en JAMA Psychiatry.
Los trastornos de ansiedad, como la ansiedad generalizada, la ansiedad social, el trastorno de pánico y la agorafobia, son el tipo de trastornos mentales más frecuentees y afectan aproximadamente a 301 millones de personas en todo el mundo. Debido a su alta prevalencia, la Comisión de Servicios Preventivos de Estados Unidos (USPSTF) recomienda el cribado para detectar trastornos de ansiedad.
Los tratamientos efectivos para los trastornos de ansiedad incluyen medicamentos y terapia cognitivo-conductual. Sin embargo, no todos los pacientes tienen acceso a estas intervenciones, responden a ellas o se sienten cómodos buscando atención en un entorno psiquiátrico.
La meditación con atención plena, que ha ganado popularidad en los últimos años, puede ayudar a las personas que experimentan pensamientos intrusivos y ansiosos. «Al practicar la meditación consciente, las personas aprenden a no sentirse abrumadas por esos pensamientos», dijo la Dra. Hoge.
El estudio incluyó a 276 pacientes adultos con un trastorno de ansiedad, en su mayoría ansiedad generalizada o ansiedad social. La edad promedio de la población de estudio fue de 33 años; 75% era de género mujer, 59% era caucásico, 15% era negro y 20% era de ascendencia asiática.
Los investigadores asignaron al azar a 136 pacientes para la terapia de reducción del estrés basada en la atención plena y a 140 para recibir el inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina escitalopram, fármaco de primera línea para tratar los trastornos de ansiedad.
La intervención de la terapia de reducción del estrés basada en la atención plena incluyó una clase semanal de 2,5 horas y una clase de fin de semana de un día completo. Los participantes también completaron sesiones diarias de meditación guiada de 45 minutos en casa. Aprendieron ejercicios de meditación de atención plena, incluida la conciencia de la respiración, la exploración del cuerpo y el movimiento consciente.
Los del grupo de escitalopram inicialmente recibieron 10 mg del fármaco vía oral cada 24 horas. Si se toleraba bien, la dosis se aumentó a 20 mg diarios en la semana 2.
El criterio de valoración principal fue la puntuación en la escala de Impresión Global Clínica de la Gravedad (CGI-S) para la ansiedad, evaluada por médicos enmascarados a la asignación del tratamiento. Este instrumento mide la gravedad general de los síntomas en una escala del 1 (nada enfermo) al 7 (la mayoría extremadamente enfermo) y se puede utilizar para evaluar diferentes tipos de trastornos de ansiedad, observó la Dra. Hoge.